- Revelation 11:19a; 12:1-6a, 10ab
- Judith 13:18bcde, 19
- Luke 1:26-38 or Luke 1:39-47
I am happy tonight to celebrate the Vigil Mass with you the Hispanic Community of St. Teresa in order to give thanks to God for His continuous blessing bestowed upon us through our Mother Nuestra Senora de Guadalupe. There is only one Mother Mary in the world who was chosen to lead us closer to His Son Jesus Christ.
I am also blessed to have a very supportive community growing in the love and devotion to the Blessed Mother. We must recognize that this feast is not only for the Mexicans, but this is also for the entire Americas, North, South and Central. This is the feast of the United States and also the Philippines because our patroness is also the Virgin of Guadalupe. History recorded that the second batch of missionaries who came to the Philippines were Augustinian Priests from Mexico. They had shared with us your culture and traditions, like POSADAS and Misa de Gallo before Christmas. Not only that, tonight signals the whole world to journey together to have a spiritual pilgrimage to the site of the Blessed Mother Apparition in Mexico. Even if we are celebrating here in this Church, we join thousands of people to venerate and pay homage to Our Lady of Guadalupe! Viva Nuestra Senora de Guadalupe! Viva Cristo Rey!
The appearance of the Virgin Mother of Jesus at Guadalupe, near Mexico City, is the event that we remember and the reason we are all here tonight. It was the Blessed Mother who appeared to the peasant and native American man, San Juan Diego. It is one of many events over the centuries that Mary appears to the poor and dispossessed, asking him to speak to the powerful a word of warning. It was a clear statement of God’s favor bestowed on the poor and humble instead of the rich and powerful. It was also a word of warning to power that those who are in power would be struck down and destroyed. When we hear these words, we are given that hope to realize our dreams, that we must be treated equally, opportunity would be opened for everyone and to secure our lives with prosperity safety together with the family. One day we will receive them our constant prayers, sacrifices, and fidelity to our faith as Catholics. All these aspirations will be attained. Though many of us are poor and struggling due to immigration status and other domestic problems, be firm to your faith. I encourage you to bring your family to the Church every Sunday and to encourage others thru your witnessing, good works and to keep the promise of the Blessed Mother of Guadalupe for a greater blessing only to make us closer to her Son, Jesus Christ.
Our liturgy tonight challenges us that the Patroness of the New World, the Americas, especially Mexico that every Mexican must share their Christian Faith and blessing of material wealth and uphold human dignity by virtue of your basic needs being met. I believe that it is not about seeking worldly power because it is almost a guarantee of God’s disfavor. We want to stay blessed and favored with God by being humble.
The readings of the Mass, from the Book of Revelations and the Gospel of Luke, express to us that Mary’s presence is the sign and the voice to manifest the presence of God. The story about Visitation is about how the Blessed Mother obeyed in compliance to God’s will. She made herself available to serve her cousin, Elizabeth with love and humility. Then Elizabeth recognized in her the visible sign of the coming of God when she cried, “Most Blessed are you among women and blessed is the fruit of your womb.” This verse illuminates the role of the pregnant Mary as the bearer of God. My heart wants to sing and rejoice that God is coming to dwell with us through Mary’s cooperation.
We are God’s people!!! So, what is the message of Mary to us all? All of us who are willing to accept our own poverty, our understanding of poverty means our total surrender and dependence on God, our Lady of Guadalupe gives us hope and strength. Now I pray with you tonight so that praying with sincerity of heart, Nuestra Senor de Guadalupe whisper to us that the coming of Emmanuel, God is with us, is indeed God’s mercy. My spirit rejoices in God, my Savior!
Viva la Virgen! Viva San Juan Diego! Viva Cristo Rey! May God bless you.
Fr. Arlon, osa
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El Dictado del Corazón
Fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe
- Apocalipsis 11:19a; 12:1-6a, 10ab
- Judit 13:18bcde, 19
- Lucas 1:26-38 o Lucas 1:39-47
Estoy feliz de estar celebrando con ustedes; Comunidad Hispana de Santa Teresa de Avila, a Nuestra Santísima, ¡Virgen de Guadalupe! Démosle gracias a Dios por Su continua bendición otorgada a nosotros a través de nuestra Madre Guadalupana. Sólo hay una Madre María en el mundo que fue elegida para acercarnos a Su Hijo Jesucristo.
Tengo la bendición de tener una comunidad que me apoya y crece en amor y devoción a la Santísima Madre. Debemos reconocer que esta fiesta no es sólo para los mexicanos, sino también para toda América, Norte, Sur y Centro. Esta es la fiesta de Estados Unidos y también de Filipinas porque nuestra patrona también es la Virgen de Guadalupe. La historia registra que el segundo grupo de misioneros que llegaron a Filipinas fueron sacerdotes agustinos de México. Compartieron con nosotros su cultura y tradiciones, como POSADAS y Misa de Gallo antes de Navidad. No solo eso, esta noche es una señal para que todo el mundo viaje juntos en peregrinación espiritual al sitio de la Aparición de la Santísima Madre en México. ¡Aunque estemos celebrando aquí en esta Iglesia, nos unimos a miles de personas para venerar y rendir homenaje a Nuestra Señora de Guadalupe! ¡Viva Nuestra Señora de Guadalupe! ¡Viva Cristo Rey!
La aparición de la Virgen de Guadalupe, cerca de la Ciudad de México, es el evento que recordamos y la razón por la que todos estamos aquí esta noche. Fue la Santísima Madre quien se apareció al campesino y nativo, San Juan Diego. Es uno de los muchos acontecimientos a lo largo de los siglos en los que María se aparece a los pobres y humildes, pidiéndole que se dirija a los poderosos con una palabra de advertencia. Fue una declaración clara del favor de Dios otorgado a los pobres y humildes en lugar de a los ricos y poderosos. También fue una palabra de advertencia al poder de que quienes estaban en el poder serían derribados y destruidos. Cuando escuchamos estas palabras, se nos da la esperanza de realizar nuestros sueños, que debemos ser tratados con igualdad, que se abrirán oportunidades para todos y asegurar nuestras vidas con prosperidad y seguridad junto con nuestra familia. Un día recibiremos nuestras constantes oraciones, sacrificios y fidelidad a nuestra fe como católicos. Todas estas aspiraciones se alcanzarán. Aunque muchos de nosotros somos pobres y luchamos debido a nuestro estatus migratorio y otros problemas internos, seamos firmes en vuestra fe. Los animo a traer a su familia a la Iglesia todos los domingos y a animar a otros a través de su testimonio, buenas obras y a cumplir la promesa de la Santísima Madre de Guadalupe de una bendición mayor sólo para acercarnos más a su Hijo, Jesucristo.
Nuestra liturgia de esta noche nos desafía a que la Patrona del Nuevo Mundo, las Américas, especialmente en México, cada mexicano debe compartir su fe cristiana y la bendición de la riqueza material y defender la dignidad humana en virtud de que se satisfacen sus necesidades básicas. Creo que no se trata de buscar el poder mundano porque es casi una garantía del desagrado de Dios. Queremos seguir siendo bendecidos y favorecidos por Dios siendo humildes.
Las lecturas de la Misa, del Libro del Apocalipsis y del Evangelio de Lucas, nos expresan que la presencia de María es el signo y la voz para manifestar la presencia de Dios. La historia de la Visitación trata de cómo la Santísima Madre obedeció cumpliendo la voluntad de Dios. Se puso a disposición para servir a su prima Isabel con amor y humildad. Entonces Isabel reconoció en ella el signo visible de la venida de Dios cuando exclamó: “Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre”. Este versículo ilumina el papel de María embarazada como portadora de Dios. Mi corazón quiere cantar y regocijarse de que Dios viene a habitar con nosotros a través de la cooperación de María.
¡¡¡Somos el pueblo de Dios!!! Entonces, ¿cuál es el mensaje de María para todos nosotros? Para todos los que estamos dispuestos a aceptar nuestra propia pobreza, nuestra comprensión de la pobreza significa nuestra total entrega y dependencia de Dios, nuestra Señora de Guadalupe nos da esperanza y fuerza. Me uno en oración con ustedes esta noche, para que orando con sinceridad de corazón, Nuestro Señor de Guadalupe nos susurre que la venida de Emmanuel, Dios con nosotros, es en verdad la misericordia de Dios. ¡Mi espíritu se regocija en Dios, mi Salvador!
¡Viva la Virgen de Guadalupe! ¡Viva San Juan Diego! Viva Cristi Rey! Que Dios te bendiga.
P. Arlón, osa